Nuestra Historia
- Orígenes en Cuba y Venezuela
- Jovellanos es una provincia de Matanzas, Cuba.
- Allí nació Leopoldo Isasi, apasionado desde joven por la cría de gallos.
- En 1961 emigró a Venezuela, primero a Barinas y luego en 1975 se estableció en Cojedes, donde inició el proyecto que más tarde sería Jovellanos.
- El legado de Don Leopoldo
- Su nieto, Jorge Antonio Martínez Isasi, heredó la pasión por la gallística desde los 12 años.
- Tras la muerte de su amigo y criador Don Raúl Orizondo, Leopoldo adquirió gallinas y un gallo de gran calidad, marcando el inicio de la línea genética de Jovellanos.
- El cruce fundador – “Los 36”
- De la gallina La Bandida (cría de Don Raúl Orizondo) y el gallo Marañón (hijo del Indio, gran padrote obsequiado a Don Raúl) nació un pollo extraordinario y una polla Ceniza CL.
- El pollo destacó por su valentía y casta, obteniendo premios importantes.
- La polla Ceniza CL se cruzó con el gallo El Tiburón (cría de Don Valerio Jiménez, adquirido por Manuel Curbelo).
- De ese cruce, marcado 36, surgieron ejemplares excepcionales, incluyendo la gallina 36, base genética de la cría actual.
- Consolidación de la cuerda Jovellanos
- Antes de 1987, los animales eran arreglados en distintas cuerdas.
- En 1987 se funda oficialmente la cuerda Jovellanos, con Ricardo Torres como gallero.
- En 1989 reciben su primer reconocimiento en el Club Gallístico Algarrobal, Carabobo.
- Logros y reconocimientos
- Década de los 90: se consigue el primer trofeo en homenaje a Don Leopoldo Isasi.
- 1995: ganan la Copa Día del Ejército Venezolano.
- Posteriormente obtienen múltiples galardones en campeonatos nacionales e internacionales como: Copa Valerio Jiménez, Torneos en Girasoles, Barquisimeto, Lara (Divina Pastora), entre otros.
- Reconocida varias veces como Cuerda del Año.
- Identidad actual
Genética Jovellanos se distingue por jugar gallos de su propia cría, manteniendo tradición, profesionalismo y calidad genética. Han modernizado su imagen con tecnología y presencia web.
Mensaje central: “El que invierte en genética ahorra tiempo y dinero.”